Más del 78% de los empleados quiere seguir trabajando desde casa, una realidad que llegó para quedarse.
Actualmente, alrededor del 70% de las empresas ya han implementado el home office durante la Pandemia, el modelo ya ha demostrado ser viable y con numerosos beneficios para empresas y empleados, requiriendo ajustes y adaptaciones para que el modelo sea cada vez más eficiente y productivo.
Para ayudar a adaptarse al nuevo paradigma de Home Office, hemos enumerado algunos puntos importantes para implementar el Home Office de la manera más adecuada posible.
Crear una política de Ministerio del Interior
Definir claramente todos los lineamientos, reglas, comportamientos y obligaciones del trabajo del Ministerio del Interior es el punto crucial para establecer un compromiso mutuo que regirá este tipo de trabajo. Esta política debe reforzarse a través de canales de comunicación y recordarse periódicamente para forzar el hábito. El uso de ritos ágiles que involucren al usuario en la rutina del Home Office y su vinculación con la gerencia de la empresa es otro punto importante para este compromiso.
Cultura de la organización
Es importante que el empleado de Home Office se sienta parte de la empresa, genere engagement en la unidad, despierte el sentimiento de pertenencia, algo valioso para mantener el capital humano de la empresa. Contar con canales para difundir la cultura de la empresa, reforzando su misión, visión y valores, y cómo cada colaborador es importante en este escenario.
Canales de comunicación
Ten abiertos varios canales de comunicación para los empleados de tu home office, ya sea con tus jefes inmediatos o con niveles jerárquicos cercanos, RRHH debe jugar un papel destacado en esta comunicación, siendo un punto focal en la resolución de conflictos y ruidos.
modelo de gestión
Es importante que todos los empleados conozcan el modelo de gestión adoptado por la empresa y estén debidamente capacitados. El modelo de gestión ágil, por ejemplo, es una excelente metodología que se adhiere totalmente al Home Office, además de posibilitar la creación de un importante hábito (ritos) de cadencia durante la semana, creando importantes interacciones entre los equipos o incluso entre sus integrantes, esto es un punto importante al que todo gerente debe prestar atención.
Herramientas administrativas
Importante para el trabajo de Home Office, la empresa proporciona todas las herramientas necesarias para llevar a cabo las actividades y procesos de los empleados, buscando extraer la máxima eficiencia y productividad. Pero, ¿cómo medir la productividad?
Las herramientas de actividad son importantes para el seguimiento del tiempo y las entregas que realizan los empleados, ayudan mucho a la gerencia a evaluar el trabajo realizado, otra forma es tener herramientas de seguimiento de la productividad, monitorean las actividades realizadas en el puesto de trabajo, seguimiento de accesos, uso de aplicaciones, tiempo de uso, horas de trabajo y compromiso de los empleados.
En este sentido, el Radar de Productividad actúa para que la gestión del Home Office y el seguimiento del empleado sea una tarea fácil y sin complicaciones, facilitando la gestión de todos los datos necesarios para una gestión eficiente y una toma de decisiones más asertiva.
Caso Moya y Motta
La empresa del sector legal que opera en servicios de cobranza bancaria, teniendo una operación con 150 PA´s.
Desafíos del proyecto
La empresa necesitaba gestionar su capital humano y sus actividades en el entorno de operación, y posteriormente la gestión del trabajo home office, teniendo trazados los siguientes retos:
- Gestione su capital humano identificando desviaciones;
- Capaz de asignar actividades repetitivas a la automatización y la capacitación;
- Proporcionar al gerente una forma de administrar mejor a sus empleados;
- Proporcionar una herramienta adecuada para implementar la operación de Home Office.
Resultado
- Con la implementación del Radar de Productividad, la empresa ha logrado mejoras significativas en su operación:
- Brindar mayor visibilidad de la operación a los gerentes y directores;
- Lograr una mejor valoración del capital humano de la empresa;
- Lograr mapear todo el flujo de trabajo e identificar puntos de mejora;
- Logrando implementar una gestión proactiva en lugar de reactiva.
